¿Cómo saber si una merluza es fresca? Aprende a diferenciar

El mar es capaz de brindarnos una generosa variedad de delicias, entre las que sin duda son las estrellas de su inmenso menú se encuentra la merluza. Siempre buscamos comprar merluza fresca para poder así disfrutar de su sabor suave y textura delicada.¡Y no sólo la merluza sino cualquier tipo de pescado! Entender cómo saber si el pescado es fresco será crucial para evitar que nos den gato por liebre. 

Pero, ¿cómo podemos saber si la merluza o cualquier otro tipo de pescado que tenemos entre manos está realmente fresco? No hará falta que seas un experto marinero, ni tampoco un chef para descubrirlo. A continuación te vamos a desvelar algunas sencillas pautas que te ayudarán a seleccionar siempre el pescado más fresco y de la mejor calidad, garantizando que cada plato en el que la utilices sea una auténtica delicia. Sólo necesitas prestar un poco de atención y tus sentidos.

Cómo saber si el pescado es fresco o congelado

Antes de comprender qué puntos pueden indicarnos los signos de frescura en el pescado, es importante entender la diferencia entre pescado fresco y pescado congelado. El pescado congelado puede ser una excelente opción, siempre y cuando se haya congelado de forma correcta y en el momento adecuado. Ahora bien, ¿cómo podemos diferenciar entre un pescado fresco y uno que ha sido congelado? 

Los siguientes trucos te ayudarán a tener el conocimiento correcto y comprobar por ti mismo que no es tan complicado como pueda parecer.

Textura

Es el primer punto en el que nos tenemos que fijar. Si quieres cómo saber si el pescado es fresco o congelado, la textura es la pieza clave a la que tendremos que prestar atención. Un pescado siempre tendrá una textura firme y elástica. Si presionas suavemente la carne con el dedo, ésta debería volver a su forma original rápidamente.

Por el contrario, en los pescados congelados la textura puede variar dependiendo del proceso de congelación, pero suelen ser menos elásticos y más blandos. 

Color

Otro dato que sin duda se presenta como clave a la hora de distinguir un pescado fresco de otro congelado es el color. La carne de un pescado fresco siempre va a lucir brillante y húmeda. En cambio, un pescado congelado puede presentar zonas de color blanquecino o apagado, indicando la formación de cristales de hielo durante el proceso de congelación. 

Ojos

¿Sabías que los ojos del pescado también pueden ser de ayudar para responder a la pregunta sobre cómo saber si el pescado es fresco? Presta atención atención a esta sección, pues un pescado fresco tendrá siempre ojos brillantes y claros, sin ningún tipo de nubosidad. Por otro lado, los ojos de un pescado congelado pueden estar opacos o descoloridos debido a la congelación. 

Olor

Seguramente este consejo ya lo conocías, uno de los más fáciles de identificar. El pescado fresco tiene un olor suave a mar o a algas marinas. Si huele a pescado de manera fuerte o desagradable, probablemente haya sido congelado o no esté en buen estado. Recuerda que desde Lonja de Celeiro ya te hemos hablado de cuánto dura la merluza sin congelar. 

Escamas y piel

Las escamas, una de las secciones más características del pescado, también pueden ser una buena señal para identificar si el pescado es fresco o congelado. Un pescado fresco tendrá una escamas firmemente adheridas a la piel, destacando además su característico brillo metálico. En cambio, si al tocar las escamas éstas se caen fácilmente o la piel da una sensación reseca, puede que el pescado haya sido congelado. 

Aletas y cola

Concluímos con otra de las partes del pescado que pueden ser clave: las aletas y la cola. Las aletas y cola siempre estarán húmedas y flexibles en un pescado fresco. Todo lo contrario con un pescado congelado, donde podremos comprobar signos de desgaste o en las que estas secciones estarán rotas o resecas. 

Con estos trucos y consejos ya tienes todo lo que necesitas para comprender cómo saber si el pescado es fresco o congelado. Al comprar merluza online en Lonja de Celeiro siempre estarás apostando por un pescado fresco, eviscerado en el propio barco y utilizando las mejores técnicas de pesca para el cuidado del fondo marino, pero también para la carne del pescado.

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